El presidente paraguayo, Santiago Peña, afirmó este jueves que la Operación Veneratio permitió retomar el control de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, donde en diciembre pasado se realizó una intervención que dejó un saldo de 12 muertos.

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“Lo que ocurrió el 18 de diciembre no fue solamente tomar control de la cárcel más grande a nivel nacional, sino de una de las diez peores cárceles a nivel mundial, y los paraguayos retomamos el control”, afirmó el mandatario en un acto de condecoración a dos militares que participaron en el megaoperativo.

A su vez, enfatizó la cooperación entre la Policía Nacional y las Fuerzas Militares para ejecutar la intervención y aseguró que con Veneratio el crimen organizado recibió el mensaje de la unidad frente a la violencia.

“La seguridad es una condición necesaria para el desarrollo económico y ahí tenemos que luchar con las fuerzas del orden que estén coordinadas”, señaló al subrayar la necesidad de aumentar los recursos destinados a las Fuerzas Militares.

No obstante, el director general de Prevención y Seguridad de la Policía Nacional, comisario Osmar Méndez, informó durante esta jornada que luego de ingresar nuevamente al referido penal integrantes de las fuerzas de seguridad incautaron una buena cantidad de armas allí.

Armas blancas, municiones, equipos informáticos, máscaras antilacrimógenas, e incluso, una lanza prefabricada, fue descubiertas en el interior de la penitenciaría más importante del país suramericano.

“Tenemos totalmente controladas las entradas a la cárcel, de punta a punta. No creemos que estos elementos se hayan introducido recientemente, porque el control de visitas es muy riguroso”, recalcó Méndez.

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